No pierdas tu dignidad. Siempre estarás en todo tu derecho de negarte.
Muestra a la otra persona cómo te sientes.
Siéntete siempre libre de tomar tus propias decisiones.
Busca el apoyo de los los demás, no estás solo.
Eres igual de víctima. Liberarte de tu rol de abusador te permitirá tener una vida más feliz.
El daño que te han hecho no es justificación para devolverlo. Perdona y libérate del dolor. Siempre puedes rehacer tu vida.
La persona sobre la que abusas no merece aquello que recibe.
Siente compasión por ti. Pues si no das nada bueno a los demás, ¿Qué te estarás dando a ti mismo?. Crece en el cuidado hacia ti y mejorarás en el cuidado hacia los demás. El primer beneficiado serás tu mismo.
Tu pareja no es tuya ni tu eres de ella. Eliminar ese sentimiento de posesión te libera. El amor con apego te hace esclavo.
REDUCIR LA DISCRIMINACIÓN
APOYAR A LAS PERSONAS QUE CUIDAN A SUS HIJOS